2006/09/22

Cuento Erótico

¿Esto no es un juego verdad?
Si que lo es, la gracia del mismo reside en que te dejes llevar
Pero ¿hacia dónde?
Ya lo verás
Me cogiste de la mano, estaba caliente y era firme, y me dejé llevar
No sabía donde me encontraba, estar a tu lado me bastaba, pese a que la presencia de él me desconcertabá
Y tú con la mano cogida te colocaste detrás de mí, me retiraste el pelo de la nuca y me besaste lenta y suavente el cuello, desabrochaste la blusa y muy despacio me la quitaste. La falda no opuso mayor resistencia, metiste las manos por dentro de ella, dentro de mi ropa interior, por primera vez me tocaste y algo se revolvió en mi interior. Una vez reconocido el terreno, comenzó la incursión a la trasera y con todo el camino conocido, la falda fue ya solamente un recuerdo.

No me dejaste darme la vuelta, lo intenté pero tus manos sujetaban fuertemente mis hombros, sentí un vertigo y vacilación que me sacaron de la sensación de bienestar que hasta ahora estaba experimentando.. Entonces entró él en juego: se colocó delante de mí y me besó fuertemente en la boca, toda la suavidad anterior, me arrancó el sujetador y las bragas y, cuando los tres éramos uno, en vez de besarme a mí, dirigió su mirada hacia tí y os fundísteis en un largo y acalorado beso. Podía sentir vuestra excitación, a estas alturas todos estábamos desnudos, de pie, en el centro de la habitación. Mientras el calor y la tensión aumentaba por segundos por fin me prestaste atención, me giraste con un golpe seco y casi sin preliminares se produjo la penetración. Extaba fuertemente excitada y por eso no me sorprendió, entonces noté un golpe seco, no había sido una, sino dos. Fueron varios minutos seguidos, ni siquiera podía gritar del placer, eramos los tres solo uno y por fin se calmaba mi sed.

Entonces te miré a los ojos y tú me miraste a mí, sabíamos que era solo el sexo lo que nos había traido hasta aquí. Así que me mordiste el labio inferior, te aferraste a mis peños con urgencia, y una vez paso ese momento de pasión y yo me giré entonces, para eso mismo vengo yo. Le cogí entonces fuertemente del pelo y el sexo dió lugar a la masturbación... después de semejante noche... quedé tendida y desecha.

No te quise ver más, no quería que fueras costumbre y rutina, acostumbrarse no era la idea.

Salí de la habitación sin mirar atrás, estaba muerta, rendida y satisfecha me había resistido a acudir a profesionales, pero no me arrepentí; el dinero gastado había merecido la pena...

10 comentarios:

Ros dijo...

Esto es lo mejor que váis a conseguir en 15 minutos... si no llego yo a más, ya sé que la redacción demás podría mejorarse, pero lo dicho 15 min max al día para cada post...

Landahlauts dijo...

15 minutos???
Entonces ¿es eyaculación precoz?

A mi estas lecturas por la mañana, y en viernes... me dejan el cuerpo verbenero para todo el fin de semana.

Anónimo dijo...

no sé no sufro de eso... yo más bien diría que es incontinencia en todos los sentidos... histerismo y aceleración de treintañera...

ah, pues a mí escribir de esto o de otra cosa no me cambia mucho la verdad

Markitos dijo...

Qué cosas me escribes para la comida.

Toxcatl dijo...

esta tarde voy a pillar a mi enfermero por banda... y le voy a dejar sequito sequito... no intenteis localizarme

Anónimo dijo...

pues hacéis muy bien todos chicos qué queréis que os diga...
la influencia almudena grandesy las edades de lulu te pueden llevar a esto

estoy pensando seriamente en situaciones que me pongan... joder, que no tengo yo muchas... que raro no??

The Walking City dijo...

¡Sorprendente! Me esperaba un rollo trío-con-mi-novio y la verdad es que me ha encantado leer el final.

PD: Tengo Interruptus al ladito de casa, así que no tengo excusa!

Anónimo dijo...

uy!!
la verdad es que no me esperaba el final de la historia!! me ha gustado mucho más lo has que has escrito tú que lo que me he imaginado yo!

Patricia dijo...

muy bueno!

Anónimo dijo...

funksturm siempre me subestimas!!!
kate, me alegro,
patricia, bienvenida, te visitaré