-Sí, morirse.
-Afortunadamente, los casos extremos como ella no aparecen a menudo. Sabemos como eliminarlo en embrión. No se puede construir una casa sin clavos en la madera. Si no quieres que un hombre se sienta políticamente desgraciado no le enseñes dos aspectos de una misma cuestión para preocuparle; enséñale sólo uno. O, mejor aún, no le des ninguno. Haz que olvide que existe una cosa llamada guerra. Si el Gobierno es poco eficiente, excesivamente intelectual o aficionado a aumentar los impuestos, mejor es que sea todo eso que no que la gente se preocupe por ello. Tranquilidad Montag.
Dale a la gente concursos que puedan ganar recondando la letra de las canciones más populares o los nombres de las capitales de Estado o cuánto maíz produjo Iowa el año pasado. Atibórralo de datos no combustibles, lánzales encima tantos "hechos" que se sientan abrumados pero totalmente al día en cuanto a información. Entonces, tendrán la sensación de que piensan, tendrán la impresión de que se mueven sin moverse. Y será felices, porque los hechos de esta naturaleza no cambian. No les des ninguna materia delicada como Filosofía o la Sociología para que empiecen a atar cabos. Por ese camino, se encuentra la melancolía.
Farenheit 451 - Ray Bradbury - 1953
5 comentarios:
Este libro me lo recomendó (y dejó) un amigo hace mucho tiempo y no lo he leído todavía. No sé por qué. Cuando acabe con "Un mundo feliz", me enredo con él, el libro, o lo quemo, a saber.
bueno si tu lo dices.....
hijo pues estás en la linea... porque ahí ahi andan... a mi el mundo feliz me gusto... a pesar de que todavía tengo que completarlo con gataca... que no no he visto...
tienes unos amigos mu raros!!!!
galoper... hombre... es una opinión no hay que hacerme caso... nunca...
¡Mu raros!, ¿poooor?.
Yo no me he leído el libro, pero la peli me gustó mucho.
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