2008/04/04

Lola 1 Ros 0 - Lola 0 Carlos 1

Mi madre y yo tenemos conversaciones surrealistas muy a menudo... desde que se jubiló ella ha evolucionado a niveles nunca antes conocidos en mala hostia y yo he debido involucionar a todos los sentidos... he dejado de saber limpiar, cocinar, planchar (que bien es verdad que ya no hago nada o poco pero es que casi no estoy en casa) además de perder la educación el respeto y la capacidad de socialización... para convertirme en sus palabras en una OKUPA con todas las de la ley.

El caso es que la semana pasada mamá y papá estuvieron cuatro días en Alemania con toda la paz y tranquilidad que eso ha aportado a mi espíritu (la que me quitan cuando están claro) en una cumbre familiar intercultural e internacional donde las haya acompañados por mi hermano (mi cuñada se ha ganado el cielo hace años) y por alguna que otra tía mía.

Mamá y yo después de su llegada no nos hemos visto en un par de días, lo que tienen las incompatibilidades de horarios buscadas a propósito para descansar de la familia, que es muy bonita de verdad, pero muy intensa, por lo menos la mía, que hablamos todos a la vez y nos decimos todo muy a la cara y a veces somos muy sinceros y a una no siempre le apetece ser sincera.

Total, que el martes, después de un día más bien tenso llega una a casa y te encuentras a la hora de prepararte la comida del día siguiente que la nevera está repleta, pero repleta a partes iguales de salchichas de todas las clases y sonho de valsa o como se ponga que son unos bombones brasileños ante los cuales mi madre saliva cual perro de Paulov y si intentas ponerte entre ella y sus bombones deberás tener en cuenta que tu vida peligrará. Tú miras el panorama y buscas los tomates y la lechuga y en estas te aparece tu madre con un plato de salchichas en la mano atacándote y te suelta: ¡come!

El día ha sido pelín largo, tus nervios a esas alturas ya no son los que debieran, para ser sinceros nunca lo son y menos desde que has decidido que te tienes que ir de casa por la salud mental, tanto de tus padres como de la tuya. Así que respiras muy profundamente y le dices que no gracias, que no me apetece. Ella te mira como si la hubieras hecho la mayor ofensa del mundo mundial y te suelta... cómo que no quieres????!!!!!!.... mmmm pues no sé... ella te suelta... pero si son de Alemania... entonces una servidora que no tiene mucha paciencia ya lo he dicho antes... la miras y la sueltas: ya, y las que traía yo también y si me apuras, las del Lidl, que tienen etiquetas en otros idiomas porque se hacen en otros países... así que cuando quieras nos vamos a un supermercado a la sección internacional y compramos comidas del mundo.

Y claro, una ha salido a su madre, es lo que tiene, con lo cual la respuesta es.... me vas comparar tú las salchichas que traías con estas, que me las ha comprado tu primo que vive allí.... entonces tú la quieres matar ya directamente que son las diez, que no te has hecho la comida del día siguiente y ni siquiera has cenado y ya no ves y la sueltas... pues es verdad, mi primo, que es brasileño y vive en Alemania lo mismo sabe más que la compañera que iba conmigo cuando las compré que es alemana nacida en el mismito Nuremberg pero vamos que si de verdad me dejas en paz las pruebo.

Mientras esta bonita escena tenía lugar con el frigorífico abierto tu sobrino ha llegado y se ha situado entre medias de tu madre y de ti y repite en un bucle infinito.... abuela, tía, chicha... abuela, tía, chicha.... así que entonces tu madre te mira y te va a soltar algo porque claro, hace más de una semana que no discutes con ella y como el niño no se callaba le suelta: Carlos, cállate, a lo que la criatura responde: cállate tú.

Es en ese momento cuando tú la miras, sonríes y adoras al niño, mientras tu madre te mira y te dice... y tú te callas también.

Una vez pasado este momento y una ducha sauna correspondiente... te sientas en el sofá y te dice.... qué... a que se está bien en casa sola... la respuesta es... mmmmmm si.... a lo que responde.... pues ya sabes lo que tienes que hacer; IRTE. Y es que mi señora madre si no dice la última palabra no se queda a gusto. Yo voy a ver si consigo adiestrar a mi sobrino para decirle cuatro cosas más a la abuela.....

7 comentarios:

Markitos dijo...

Mi prima Paula hace lo mismo.

Hice bien en enseñarla a atacar a una tia política mia, que no cae bien a nadie por que es una bruja y profesora de religión, de esas que se saltan 8 de los 10 mandamientos.

Te comprendo, los 10 días sin mis padres han sido manita de santo.

Ros dijo...

hombre en segovia con tus padres... pero si te viens a madrid estas solo...

como está el proyecto... ya eres arquitecto oficialmente????

isobel dijo...

jajajaja que ternura, un beso y feliz finde

The Walking City dijo...

Sal de ahí, Ros. Por tí la primera, y luego, por el resto, que sufrimos reviviendo esas situaciones. Familia sí, pero máximo 3 días.

Ros dijo...

jajaja... si hay que salir... pero que conste que mi señora madre es genial... pero lo que tú dices, máximo 3 días...

tu y yo tenemos que hablar acerca del ciclo de electrónica de la casa encendida del mes de abril... very very interesante flor!!!!!

Ipodificada dijo...

Sonho de Valsa....uMMMMMMMMMMMMMM, me has tocado la fibra sensíble, aunque yo siempre fui más de OURO BRANCO.

Y si, creo que quieren que te vayas, pues ya sabes nena, a buscarse la vida... mi madre quiso que yo me fuera con 21 años y me fui, y aqui me tienes.

Tenemos que hablar.

BS

Ros dijo...

siiiiiiiiiiii yo también soy de ouro branco... qué buenos... todos los de lacta la verdad...
el caso es que mi madre tiene en su cabeza un pensamiento que es el siguiente: si mis hijos se van de casa y son capaces de mantenerse por sí mismos... entonces lo he hecho bien... y como mis otros hermanos se fueron a los 30... pues yo 2 años más en casa... que a la mujer se le hace raro.... es como si fuera más tonta que los otros dos... lo cual tampoco vamos a discutir porque saldría mal parada....

pero vamos, tengo a brodel buscando apaño...o algo

tenemos que hablar babe!!!! a ver si esta semana o la que viene te veo pero antes te llamo...

besos