2013/10/18

Julio de la Rosa en el Teatro Lara




Ayer estuvimos viendo a Julio de la Rosa en el Teatro Lara. La verdad es que, desde que salió su último trabajo, "Pequeños trastornos sin importancia", teníamos muchas ganas de verle en directo, le teníamos muchas ganas sí. Yo le recuerdo de varios festivales y de haberle conocido en un lejano Día de la Música en Matadero cuando el evento era gratuito y él estaba presentando "El Espectador". Desde entonces me gusta su música, me atrae su carrera, me interesa que además de cantante haga bandas sonoras, que escriba o simplemente que pueda coordinar tantísimas cosas a la vez y que, además me parezcan siempre buenas. Así que, después de esperar desde enero para disfrutarle en directo, ayer nos plantamos en el Teatro Lara puntualmente.

Que el concierto empezase solamente media hora después de la hora acordada nos sorprendió gratamente, más aún cuando nos habían comentado que el día anterior The Pastels empezaron tardísimo así que, tras tomarnos la cervecita de rigor ofrecida por Son Galicia y después de certificar que en Madrid la gente moderna no paga sino que espera a los concursos para ver a artistas que le gustan (la cantidad de tarjetones de invitación era más de lo recomendable para cualquier  concierto, más aún para un recinto así), nos sentamos a disfrutar del espectáculo.

La banda que le acompañaba, compuesta por guitarra, batería (dos), bajo y teclados generó un comienzo atmosférico para poner en escena "El Traje", que dió comienzo al concierto. A continuación, "Colecciono Sabotajes" y "Gigante" y tres temas más que desembocaron en una preciosa "Un corazón lleno de escombros" cantada a dúo con la teclista. A esa altura del concierto, Julio estaba como en casa y disponía del espacio de una manera muy cómoda y que transmitía un buen rollo increíble a los que allí estábamos disfrutando del concierto.

A partir de ahí "Kill the Mosquito", "Tarde a todas partes" y "Kiss Kiss Kiss Me" y varios temas más que nos fueron enamorando un poco más si cabe. A mi me gustó especialmente "Las Camareras" y "Entresemana".

Un concierto pues, que no defraudó para nada las espectativas que teníamos y que me ha hecho que me guste aún más si cabe el jerezano y que me hace pensar que me gustaría que la gente dejara de identificarle con El Hombre Burbuja, que también era estupendo sí, pero que el proyecto actual tiene ya suficiente recorrido y calidad como para que no se le recuerde siempre por esa etapa.

Además, seguirle en redes es una maravilla, es el claro ejemplo de denuncia/compromiso social que esperamos de todos los artistas que nos gustan y que muchas veces no podemos ver porque priman las decisiones de agenda y políticamente correctas sobre el pensamiento del artista.

Y también hay algo que me molesta. Me molesta que me digan que me gustan los tristes. Lo de ayer no fue un concierto triste, fue un concierto que fue pura energía y emoción. No me disgusta la música más tranquila, pero me gusta que, como hace Julio, en directo le dé una nueva lectura a sus temas.

Os dejo con el listado de canciones que tocó ayer (después de llevarme el setlist claro, sino de qué):




2 comentarios:

Ses dijo...

Ay, tengo que empezar a tener más vida social, siempre que te leo me asalta un temor raro en el que me doy cuenta de que ya no salgo tanto.

Ros dijo...

Ses, yo ha habido temporadas de no hacer mucho tampoco, son necesarias :)